Hace un tiempo, fijamos con Terranova lugar para una entrevista falsa en la esquina de San José y Estados Unidos, enfrente de donde vivió Murena y a pocos metros de donde paró Duchamp durante su breve estancia en Argentina. El lugar estaba cerrado así que debimos trasladarnos a otro bar en las inmediaciones. Ahora, el joven padre (para qué esperar al parto para declarlo en funciones) nos visitó nuevamente. Anduvo por el bar Dante, en Carlos Calvo y San José, en la esquina misma de la que será la sede de la Facultad de Ciencias Sociales (la obra comenzó y dicen que la sede estará lista en poco más de 150 días). Terranova habrá visto los anuncios de los shows de tango que el bar Dante (que por ahora contempla impávido las grandes obras en el barrio) ofrece por las noches. Lo que todavía no está anunciado es la apertura del Chez Freire Grand Hotel, en la esquina de Humberto Primo y Santiago del Estero, regenteado por S. y su hermano Anselmo y en el cual tengo una participación minoritaria como animador cultural. Desde que el proyecto fue formulado hace unos meses fue madurando lentamente y ahora se están ultimando los detalles (afortunadamente conseguí que los Freire desistieran del bar, porque ya me veía yo preparando tragos exóticos con recetas robadas del programa de Narda Lepes). Una razón más para que la gente visite Montserrat.
Buenas tardes, quería pedir un favor: ¿podrías publicar la dirección de los remates de San Andrés de Giles?
ResponderBorrarTe estaría enormemente agradecida.
¿hay algún requisito para participar?
La dirección no me la sé. Pero basta con llegar a la rotonda y doblar a la izquierda. Cualquiera podrá decirte porque el pueblo es un pañuelo. El único requisito es llevar la platita.
ResponderBorrarPerdón: doblar a la derecha, yendo desde Buenos Aires.
ResponderBorrarQué bueno, acabo de leer esto publicado en el 2005, y yo viví durante varios años en la casa de la calle San José 746. A la vuelta, las ventanas de la casa de Murena, que era en la calle Independencia y San José (entonces Estados Unidos y San José no es enfrente, sino a la vuelta). Y el bar de San José y Estados Unidos era un maravilloso y entrañable bar de barrio. Amo ese lugar, que ahora ha sido un poquito escupido por una pretenciosa españolada para el turismo interno, pero que conserva el aura (para mí al menos, que en aquella época usaba pelo largo y flequillo tapándome las cejas y militaba en un periódico clandestino) de años vividos intensamente y a contrapelo.
ResponderBorrarGracias por recuperarlo para mí. Y lo que no sabía en aquellos tiempos era que por ahí anduvo Duchamp. Creo que tampoco sabía quién era Duchamp. hasta que un año después de vivir allí lo conocí al increíble y mágico Esteban Fassio.