jueves, 26 de octubre de 2006

Nicolás

por Daniel Link

Decir que vamos a extrañar
lo es algo obvio. Decir que su muerte es injusta presupone que alguna no lo sea. Nicolás era un gran profesor y un crítico de una generosidad admirable. Le gustaba que se lo reconociera como una estrella (porque lo era) y le gustaba hacer gala de una tibia maledicencia en la que nadie creía porque era completamente inofensiva (el ingenio Guermantes, y no otra cosa).
Marcó a varias generaciones de estudiosos de la literatura (entre los que me cuento, aún cuando nunca fui su alumno ni establecí con él relaciones discipulares). Sabía defender la "literatura de verdad" del desdén de los burócratas y los mercachifles de siempre.
Él, que gustaba decir de si que era el "verdadero niño proletario", últimamente se había dedicado a estudiar el miserabilismo en la literatura argentina.
Era un trabajador incansable y dividía sus esfuerzos (que la medicina le desaconsejaba) entre la Universidad de Buenos Aires y la Universidad de Rosario.
La última vez que nos vimos me dijo, zumbón como siempre, "ahora sos un erudito". "No", le contesté, "jamás me atrevería a seguir tus pasos". Era, en muchas áreas, de una erudición apabullante, pero era, por sobre todas las cosas, un gran lector.
Vamos a extrañar
lo . Su muerte es injusta.


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Facultad de Filosofía y Letras
Universidad de Buenos Aires
COMUNICADO DE PRENSA
La Facultad de Filosofía y Letras participa del fallecimiento del Dr.Nicolás Rosa, profesor de Teoría Literaria III, cuyos restos serán velados hoy a partir de las 19 hs. en Malabia 1662

3 comentarios:

  1. Anónimo5:11 p.m.

    Yo lo quería tambien. Su materia y su enfoque es una de las tres únicas razones, para mí, para estudiar Letras en la UBA. Uno de los tres lugares en los que las supuestas estupideces que puedo decir y escribir tienen toda la relevancia y razón de ser.
    Se quejaba de las cosas que me quejo yo.
    También me gustaba su dicción y cuando repetía la última palabra de cada oración.
    Y cuando de golpe bajaba a un volumen inaudible y explotaba en un grito.
    Un capo.

    _Ferko

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  2. Por si a alguien le interesara (¿?), yo escribí algo sobre esto también, seguramente viciado por la falta de comprensión que da la cercanía a los hechos.

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  3. Anónimo1:26 a.m.

    Me parece importante que leas esto, Link: http://identificacionesimaginarias.blogspot.com/2006/10/crnicas-universitarias-nicols-rosa.html

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