Informe para una academia: Congreso sobre Formas de Vida
por Daniel Link para Soy
No voy a decir, como muchos de los integrantes de la Cámara Alta aclararon, que yo tengo un amigo homosexual. Tampoco, como solía decirse hasta hace unos años, que tengo un amigo judío. Diré algo más radical: yo tengo un amigo fascista.
Este amigo, naturalmente, negará su fascismo diciendo que es anarquista y que su rabiosa oposición al matrimonio universal se basa en una repugnancia total y definitiva a cualquier forma de estatización de las relaciones humanas. Esa forma radical de pensamiento (que en momentos de excesos alcohólicos cualquiera podría suscribir) es lo que en filosofía política se reconoce como anarco-capitalismo, una de las máscaras que el fascismo tiene, con su desprecio a la juridicidad, las instituciones, las burocracias parlamentarias y todo lo que no tenga que ver con el decisionismo.
Según su criterio, habría que prohibir totalmente el matrimonio, y no ampliar su alcance. No discuto con él (¿quién puede o quiere discutir con un fascista?), pero sé que se equivoca en varios puntos, pero sobre todo en uno: el nivel de análisis.
Cualquiera puede poner a trabajar las hipótesis de Engels en El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado y declarar que allí está el Mal. Claude Lévi-Strauss se dejó llevar por la misma ilusión metodológica y en un texto memorable, la “Lección de escritura” incluida en Tristes trópicos, declaró que escribir volvía a las personas esclavas de la Ley y las sometía a un ritual de poder. La historia de la escritura, en su perspectiva, coincide con la historia de la dominación.
Por supuesto, Lévi-Strauss tiene razón en un nivel de análisis, pero en otro no. En países como la Argentina, con índices endémicos de analfabetismo, una hipótesis así carece de todo fundamento liberador. Sólo desde la “grandeur de la France”, con su probada eficacia escolar, podría sostenerse una versión tan pesimista de la alfabetización.
Con el matrimonio universal pasa lo mismo: podemos señalar las miserias del “instituto matrimonial”, pero sólo a partir de su universalización, es decir, de la transformación de un privilegio en derecho. Ya podremos reírnos de la épica pequeñoburguesa de las locas y tortas casamenteras (como del voto obligatorio), pero lo primero es la causa de los universales (y después, su crítica).
(continuará... el viernes)
I agree, primero la universalizacion, despues las critica.
ResponderBorrarhace poquito me cruce con un librito muy bonito y divertido. 'No future. Queer theory and the death drive', Lee Edelman. Pense en vos.
me comentaron que ya hay fecha, by the way... :)
xx
bravo! bien dicho.
ResponderBorrartal cual, qué bien le queda la sensatez a linkillo, calmas palabras de sabiduría
ResponderBorrarCheers.
ResponderBorrar¿Posta tenés un amigo fascista?
ResponderBorrarCaro daniel, princípios são princípios, me parece. Não sou fascista apenas porque sou contra o casamento de qualquer tipo. A agressão a priori a quem pensa de forma diferente não seria uma forma fascista de inibir um debate sério como este?
ResponderBorrarfábio brüggemann, florianópolis, brasil
Que bueno que tengas un amigo facista... a mí me pasó algo (mejor o)peor: tengo uno progresista. Cuando aprenda a leer, le voy a dar las "Observaciones sobre la filosofía de la historia" de Benjamin, para ver si lo puedo llevar al futuro ...
ResponderBorrarabrazos
Ariel X
"eres un agente nazi"
ResponderBorraryo tengo un amigo que lee paulo coelho (chau, les gané a todos!)
ResponderBorraryo tengo un amigo algo fascista, qe es "mi" compañero; y bueh...; pero como los peronistas, tenemos desde hoy nuestro día(y nuestra noche: cuidado). besos.
ResponderBorrarlo gracioso es que los que decían que tenían amigos homosexuales votaban en contra del matrimonio, lo usaban como argumento para decir que no discriminaban.
ResponderBorrardaniel, casa-te comigo!
ResponderBorrarVíctor, querido, es la primera propuesta formal de matrimonio que recibo y estoy tentado de aceptarla. Soy partidario de un matrimonio en cada puerto. Lo único que quisiera advertirte es que hijos ya tengo, de modo que no tengo ganas de adoptar ninguno nuevo. Si tú "lavas louças", yo me encargaré de la ropa de cama.
ResponderBorrarCaro Daniel, Obrigado pela gentil reprodução de nosso pequeno texto em seu blog. O "Linkillo" está linkado ao "A Navalha de Dalí". Gostei muito de seu blog e passei a segui-lo. Obrigado uma vez mais, Abraços, Murilo D. C. Corrêa.
ResponderBorrarPor eso tengo enemigos reaccionarios de a carradas, me contento en su descuento, y así, menor, poder pensar.
ResponderBorrarLos fascistas que aparecen bajo otras formas aparentemente revolucionarias suelen ser, al menos, peligrosos.
ResponderBorrarHoy me levanté y sentí que, aunque sea un poquito, todas y todos somos más libres (y no soy peronista)
Abrazos y salú!