Por Daniel Link para Perfil
Participo de los ideales de una generación formada en la “religión de la obra pública”: mis excursiones escolares me llevaron a visitar acerías, plantas nucleares, centrales hidroeléctricas y todo aquello que contribuyera, siquiera imaginariamente, a sostener la grandeza de una nación.
De modo que mi percepción de la realidad está flitrada por esos aprendizajes infantiles: me emocionan las vías de comunicación, los diques, los centros de producción y distribución energética. Soy como un Fausto criollo y, aunque soy consciente de las limitaciones de una perspectiva semejante, no dejo de notar los “progresos” con los que me cruzo.
Me gusta viajar por Argentina en auto. Me permite hacerme una idea más cabal del “interior”, sus anhelos y sus imposibilidades. He estado, en las últimas semanas, en General Villegas, Santa Fe, Paraná, Coronel Pringles.
No debería generalizar, pero lo hago: da la impresión de que la “obra pública”, ese motor de las economías, no se distribuye regularmente entre las provincias. En Rosario, debimos sufrir la pesadilla (amortiguada porque uno es capaz de imaginar un futuro mejor cuando la obra esté terminada) de atravesar una ampliación de la autopista de circunvalación de la ciudad. En Santa Fe, estaban duplicando los carriles que conectan con el túnel subfluvial.
En cambio, la conexión de la autovía de la ruta 3 (San Miguel del Monte-Cañuelas) con la autopista Ezeiza-Cañuelas es un desastre incomprensible: son sólo 7 kilómetros y medio que deberían, a esta altura del partido, estar integrados al sistema de autopistas de altísima circulación de la zona, que la desidia de los gobernantes ha transformado en un campo de batalla. Y el tramo de ruta 226 que une la capital del cemento con Coronel Pringles está, desde hace cuatro años, abandonada a la erosión natural (eso sí, peaje incluido). La imprescindible autopista Presidente Perón (continuación de la autopista del Buen Ayre), que esperamos desde hace diez años, todavía espera fecha de realización.
No sé quiénes son los responsables de inequidades semejantes, pero es raro que lo que en un lado puede hacerse, en otro no.
Hola, Daniel.
ResponderBorrarEscribo desde SF sólo para decirte que no son inequidades, jeje.
La cuestión es que la obra de la 168 estuvo planeada y sin hacerse desde... pufff. Y era una las rutas con más cantidad de autos como sombrero por año.
El conurbano ha recibido una enorme cantidad de obras (está bien que también tiene la mayor parte de la población), mientras que, al menos en la ciudad de SF, un poco de atención de vez en cuando... es más que necesaria, sobre todo atendiendo a la diferencia política entre provincia y nación.
Eso nomá. Saludo
Daniel,
ResponderBorrarCada vez mas pienso que tenemos que romper las pelotas y hacer algo para tratar el tema del movimiento de gente (fluidez) de la forma mas integral posible. Con esto pienso: 1) deberiamos exigir que las rutas mas transitadas del pais sean todas autopistas de vias separadas y en perfecto estado, 2) carnet de conductor unico a nivel nacional, 3) base de datos integrada con las faltas cometidas y suspender o sacar el carnet de por vida segun la falta, 4) revivir el tren para distancias medias y largas y mejorar el sistema en BA y grandes ciudades, 5) entubar todos los pasos a nivel, 6) generar una verdadera campaña de concientizacion nacional sobre el uso del vehiculo y sus consecuencias. Cada año, este año, el que viene, mueren cerca de 10.000 personas en accidentes. Cada año 50.000 o mas personas sobreviven con todo tipo de secuelas fisicas y mentales. Cada año 100.000 o mas personas pierden un hermano, tia, madre, abuelo. Es una catastrofe de magnitudes descomunales. Las rutas argentinas son unas de las mas peligrosas del mundo. Si sacaramos tantos camiones y buses y mejoraramos las rutas mas transitadas no deberian morir tanta gente...
Si, pero…
ResponderBorrarConstruyeron la Autopista Rosario-Córdoba, pero NO la Chumbicha-Catamarca.
Terminaron 2 centrales de 800 Mw c/u, pero NO la de Atucha II (todavía).
Cada día te parecés más a Sarlo (La Nación, 24 de noviembre): “el regreso de la política… la gestión social… la soberanía Nacional…”
Pero NO “las presiones sobre la Justicia… el clientelismo de las políticas sociales… el sindicalismo mafioso…”
Las dos posiciones están resumidas en un tango: “el malevaje extrañau/ me mira sin comprender”.
Comparten el asombro que Sarmiento no lograba explicarse en el Facundo:
"Sombra terrible de Néstor, voy a evocarte para que, sacudiendo el crispado polvo que cubre tus cenizas, te levantes a explicarnos...
Tú posees el secreto, ¡revélanoslo!...
"¡No! ¡No ha muerto! ¡Vive aún! ¡El vendrá!"
¡Cierto! Néstor no ha muerto, está vivo en las tradiciones populares..."
FACUNDO (Domingo Faustino Sarmiento)
Textual, reemplazar Néstor por Facundo, crispación por ensangrentado y tendrán las primeras 10 líneas del libro.
Atrasan 155 años, pero al menos, comparados con un grande.
Me encantó lo de la "religión de la obra pública". La macana es que la única idea que se les ocurre últimamente es hacer rutas y autopistas, cómo si lo único que necesitáramos es circular como dementes (y en auto, por supuesto, solitos en nuestros autos).
ResponderBorrarLa autopista Perón, si la hacen como quieren, por el medio del Parque Pereyra, va a terminar siendo otro ejemplo de destrucción de cosas que no tienen arreglo...
http://www.perfil.com/contenidos/2010/11/09/noticia_0010.html