2. Después, la consabida charla ("¿Venís siempre acá?"):
jueves, 30 de abril de 2015
martes, 28 de abril de 2015
sábado, 25 de abril de 2015
"Así, quedate quietita que ahí llego..."
En coma hace un año, la abusaron y embarazaron
Insólitamente su familia se negó denunciar el incidente en la Justicia para que sea investigado.
Insólitamente su familia se negó denunciar el incidente en la Justicia para que sea investigado.
El día después de mañana
por
Daniel Link para Perfil
Aprovecho
estos días de contienda electoral (que después de mañana se tomará
una pausa) para homenajear a una de las mentes más brillantes del
siglo pasado, el centenario de cuyo nacimiento se cumple el próximo
12 noviembre, fecha alrededor de la cual se realizarán homenajes en
todo el mundo, incluso en Buenos Aires.
En
Mitologías,
uno de sus libros más hermosos (siempre será difícil decidirse, y
el asunto se resolverá antes según el humor del lector que según
la calidad intrínseca de los argumentos que hay en cada uno de
ellos, todos extraordinarios), Roland Barthes incluyó artículos
publicados previamente en la prensa francesa, en los que pretendía
desmontar los dispositivos de naturalización de la cultura (el modo
en que se presenta como “natural” la más salvaje imposición de
unidades ideológicas destinadas a perpetuar la dominación política
y social).
Una
de esas mitologías se llama “Fotogenia electoral” y allí
Barthes sostiene que, en la
medida en que la fotografía es elipsis del lenguaje y condensacion
de un "inefable" social, constituye un arma
anti-intelectual que tiende a escamotear la política (entendida
como un cuerpo de problemas y soluciones) en provecho de una "manera
de ser" socio-moral.
Así,
la fotografía electoral sería, ante todo, reconocimiento de algo
irracional extensivo a la política. Lo que atraviesa la fotografía
del candidato no son sus proyectos sino sus móviles, sus
circunstancias familiares, mentales, eróticas, todo ese modo de ser
del que el candidato es a la vez es producto, ejemplo y estímulo.
Lo que la mayoría de nuestros candidatos (los de Barthes, en su
momento; los nuestros, este año) da a leer en su efigie es su
posición social: la comodidad espectacular de las normas
familiares, jurídicas, religiosas en las que se instala.
El
uso de la fotografía electoral supone, naturalmente, una
complicidad: la foto es espejo, deja leer lo familiar, lo conocido,
propone al lector su propia efigie, clarificada, magnificada. El
elector se encuentra expresado y transformado en héroe, es invitado
a elegirse a sí mismo, a cargar el mandato que va a dar con una
verdadera transferencia física. Esa transferencia física era, para
Barthes (quien, por supuesto, fue marxista), el soporte de la
representación política.
En
ese aspecto, por lo menos (aunque hay otros muchos), la perspectiva
de Barthes coincide con el de la teoría crítica alemana. En
Dialéctica de la ilustración, Theodor Adorno y Max
Horkheimer refutaron el error de considerar opuestos el proceso de
nivelación y estandarización de los hombres y mujeres en el
capitalismo de masas y el refuerzo de la individualidad en las
llamadas personalidades dominantes.
Los
políticos de hoy, razonaron Adorno y Horkheimer, no son superhombres
sino meras funciones de su propio aparato publicitario, puntos de
cruce de las mismas reacciones de las masas. El jefe no es sino la
proyeccion colectiva y desmesuradamente dilatada del yo
impotente de cada individuo.
No
por azar, razonan los dialécticos con humor barthesiano, tienen aire
de peluqueros, actores de provincia o periodistas de ocasion.
Incluso, diríamos hoy, algunos bailan penosamente.
Parte
de su influencia moral deriva justamente del hecho de que los
candidatos, impotentes en sí mismos y similares a cualquier otro,
encarnan la plenitud del poder señalando, al mismo tiempo, el
espacio político vacío en que el poder ha venido a caer (sobre todo
en sociedades como las nuestras, donde el capitalismo no necesita del
Estado sino marginalmente para obrar con eficiencia).
Es
la individualidad en ruina la que triunfa en nuestros candidatos
peluqueros-actores de provincia-periodistas de ocasión-bailarines de
concurso. Los jefes de la política (los que triunfan hoy, los que
triunfarán mañana) no son sino lo que fueron siempre: comediantes
que representan el papel de jefes.
Hasta
aquí no se trata de opiniones. No de las mías, por cierto, pero
tampoco de las de Roland Barthes o de Adorno y Horkheimer, quienes
analizaron determinados procesos que, con el tiempo, no han hecho
sino profundizarse. Photoshop, extensiones de pelo, grabaciones
telefónicas y twitters sólo sirven para decir “tengo tus mismos
sueños, vacíos de esperanza”.
viernes, 24 de abril de 2015
miércoles, 22 de abril de 2015
martes, 21 de abril de 2015
¡Volvió la televisión!
Penny Dreadful
Penny Dreadful 2x01 - Fresh Hell (2015)
Calidad : HDTV
Fecha : 20-04-2015
Idioma Inglés
Subtitulos
Calidad : HDTV
Fecha : 20-04-2015
Idioma Inglés
Subtitulos
lunes, 20 de abril de 2015
domingo, 19 de abril de 2015
sábado, 18 de abril de 2015
Yo soy espía
Por Daniel Link para Perfil
La explosión de asuntos ligados con el
espionaje, su relación con la política local y los vínculos con
los grandes nucleos de conspiraciones de agencias gubernamentales
(CIA, Mossad, MI6) y paragubernamentales de inteligencia nos puso en
situación de ansiedad televisiva, tan disparatado suena todo (y, al
mismo tiempo, tan ominoso y tan vulgar).
Destaco dos series, más o menos
idénticas en sus presupuestos. Una es The Americans, que
cuenta la vida de agentes de la KGB infiltrados como una familia de
ciudadanos estadounidenses durante los últimos años de la Guerra
Fría. La trama pretende ser realista y funda su verosimilitud en el
hecho de haber sido inspirada por ciertas notas de un ex agente de la
KGB.
Allegiance es más encantadora,
pero no gustó y fue discontinuada. A diferencia de la anterior,
sucede en época actual. Una madre
rusa que reside en Brooklyn es la espía, asistida por su amado
esposo irlandés y la hija mayor de la familia, Natalie, también
cooptada por el SVR (Servicio de Inteligencia Extranjera ruso), a
cuya cabeza están unos resentidos que sólo quieren destruir a los
Estados Unidos, porque sí.
Se desconocen las
tareas de inteligencia que habrían realizado estas mujeres antes de
que la serie comenzara, porque todo se organiza alrededor de la
figura del hijo varón, Alex O'Connor, muchacho muy despierto al que
los rusos quieren poner al servicio de sus oscurísimos propósitos
desde el momento en que el joven es promovido en la CIA, para la cual
trabaja.
Si en
la tragedia griega las familias estaban desgarradas por principios
éticos y concepciones del Estado irreconciliables, la familia de
Allegiance
logra sobreponerse a la guerra desatada en su seno entre las más
poderosas agencias de inteligencia del mundo y marcha unida hacia su
propia redención, como tendría que ser siempre, incluso en el caso
(no lo quiera el cielo) en que un hermano militara en la Cámpora y
el otro en el massismo.
jueves, 16 de abril de 2015
miércoles, 15 de abril de 2015
¡Éramos tan jóvenes!
Laurie Anderson en Argentina
Laurie Anderson llega a la Argentina para presentarse el próximo 8 de mayo en el Teatro Ópera.
El 10 de mayo dará una charla abierta y gratuita en el maravilloso Parque de la Memoria.
Laurie Anderson llega a la Argentina para presentarse el próximo 8 de mayo en el Teatro Ópera.
El 10 de mayo dará una charla abierta y gratuita en el maravilloso Parque de la Memoria.
martes, 14 de abril de 2015
lunes, 13 de abril de 2015
A saltar!
El Partido Obrero quedó tercero en la elección en Salta
Claudio Del Pla se postuló a la gobernación y obtuvó el tercer lugar en las primarias del domingo. Cómo creció la izquierda y por qué aún se lanza dividida.
Claudio Del Pla se postuló a la gobernación y obtuvó el tercer lugar en las primarias del domingo. Cómo creció la izquierda y por qué aún se lanza dividida.
domingo, 12 de abril de 2015
Nuestra Señora de la Argenta
Por Beatriz Sarlo para Perfil
A través de la cadena nacional, Cristina Kirchner vuelve a apelar más a los consumidores que a los ciudadanos. Máximo déjà-vu.
A través de la cadena nacional, Cristina Kirchner vuelve a apelar más a los consumidores que a los ciudadanos. Máximo déjà-vu.
sábado, 11 de abril de 2015
Crisis de la universidad
por Daniel Link para Perfil
La Universidad de Buenos Aires está
muy lejos de aquélla que conocimos quienes comenzamos a trabajar en
ella durante la década del ochenta. Lo que entonces era una apertura
hacia el mundo y un proceso de imaginación que escandalizaba a los
sectores más conservadores, hoy se ha convertido en una lucha despiadada por puestos de trabajo mal pagados. Lo que entonces pasaba
por la constitución de equipos de trabajo con objetivos a largo
plazo fundados tanto en imperativos epistemológicos como éticos,
hoy se ha convertido en el atrincheramiento en posiciones
individuales como respuesta autista a la crisis política que vivimos
desde hace más de diez años.
El Sr. Barbieri, novísimo rector de la
Universidad de Buenos Aires lanzó, como primera medida de su
gestión, una reformulación del Ciclo Básico Común creado por el
Sr. Francisco Delich, rector normalizador de la UBA entre 1983 y
1986. En la práctica, lo que ha sucedido es que, al comienzo del
ciclo lectivo, se suprimieron los Talleres de Lectura y Escritura que
funcionaban en el contexto de la pedagogía de la cátedra de
Semiología que, desde su invención, fue la formadora de varias
generaciones de docentes-investigadores.
Los talleres son vitales para
garantizar la democratización de determinadas habilidades necesarias
para la vida universitaria que los alumnos emprenden al comenzar sus
estudios y que la escuela media no brinda parejamente.
Para llevar a cabo esa supresión, las
autoridades promovieron (sin que mediara concurso alguno y, en
algunos casos, con convocatorias a concursos paralizadas desde hace
décadas) a algunos docentes que aceptaron, a cambio de esa promoción
miserable, la renuncia a intervenir en los desequilibrios formativos
heredados de la escuela media. Así de vil es la lógica de
funcionamiento actual de la UBA: se renuncia a la pedagogía por
cargos entendidos como moneda de cambio en un universo de cálculo
egoísta.
viernes, 10 de abril de 2015
CsO o Tejido Orgánico No Diferenciado
Meet Alessandro Boezio and his twisted anatomical remixed clay sculptures.
(vía @andreali Andrea Li)
¿Quién dijo que todo está perdido?
NOWHERE (2009) / central scene / for Pina from Dimitris Papaioannou on Vimeo.
Actualización:
Sí, es el mismo de los Juegos Olímpicos de Atenas, 2004:
jueves, 9 de abril de 2015
"Palacios plebeyos"
El cine-teatro histórico Gran Rivadavia reabrirá sus puertas
Tras 11 años de permanecer cerrado y un período de remodelación, el próximo viernes 24 de abril se realizará la reapertura.
Tras 11 años de permanecer cerrado y un período de remodelación, el próximo viernes 24 de abril se realizará la reapertura.
¡Dame dos, dame tres, dame más!
Comprar ropa barata provoca lo mismo que un orgasmo
Así lo asegura un estudio científico que analiza el proceso neurológico que se desencadena cuando vamos de shopping.
Así lo asegura un estudio científico que analiza el proceso neurológico que se desencadena cuando vamos de shopping.
miércoles, 8 de abril de 2015
martes, 7 de abril de 2015
lunes, 6 de abril de 2015
sábado, 4 de abril de 2015
Políticas lingüísticas
Por Daniel Link para Perfil
La curiosidad de Rafael Spregelburd lo
llevó, hace unas semanas, hasta un Diccionario Latinoamericano de la
Lengua Española lanzado por la Universidad de Tres de Febrero (puede
usarse en http://untref.edu.ar/diccionario/),
de cuyo diseño y puesta en línea participé.
En poco menos de un mes, el Diccionario
tuvo miles de visitas, cuenta ya con un repertorio de 380 palabras y
debates implícitos que se dejan leer en la votación de los usuarios
(pulgar para arriba/ pulgar para abajo).
Una de las características del
Diccionario es que quien ingresa una definición debe decidir también
una valoración del término definido (si considera que la palabra es
técnica, humorística o despectiva) y un registro específico para
su uso (el ámbito familiar, estudiantil, literario o juvenil,
digamos). Bien pronto nos dimos cuenta de que nos faltaban
marcadores. Por ejemplo: ¿por qué no están los Estados Unidos en
la lista desplegable de países a elegir? Después de todo el español es la
segunda lengua de los Estados Unidos y es difícil e injusto
atribuir una palabra usada allí a los países de origen de los
migrantes, porque muchas veces el término es propio de esa babel
lingüística efecto de la
migración masiva.
En cuanto a la valoración, las polémicas en las que se vio envuelta la Real Academia Española a
propósito de los usos sexistas del lenguaje (“Sin léxico sexista
no se podría hablar”, dijo un académico) nos alertaron sobre ese
marcador: nos gustaría saber si los hablantes son conscientes de la
fuerza discriminatoria de las palabras que utilizan (“presidenta”,
por ejemplo). Pedimos, por lo tanto, que se incorporara la etiqueta
“sexista” a las posibilidades de valoración.
Con los registros el asunto se complica
porque la lista puede ser infinita: “invisibilizar”, un término
que ya puede encontrarse en muchos papers académicos, fue en
principio una (horrible) palabra del registro “periodístico”. Y
la mayoría de las diferencias que los hablantes latinoamericanos
encuentran en sus léxicos tienen que ver con la denominación de
plantas y animales comestibles, es decir, con el registro culinario
(“boniato” es nuestra “batata”, y así sucesivamente). El
periodismo (que es tal vez el registro de prosa más atado a los
vaivenes del presente) y la cocina son enormes calderos de invención
terminológica y merecían tener una etiqueta propia.
Y después están las minorías, el
famoso diez por ciento. No los que pagamos impuesto a las ganancias,
sino los que sostienen la disidencia sexual, al apartarse de la
heteronormatividad. ¿Tienen su propio vocabulario? Agregamos un
marcador, para averigüarlo. “Rural”, sin embargo, no será nunca
un registro de este diccionario, porque suponemos que los medios han
acabado con la diferencia respecto de “urbano”, y “político”
tampoco: sabido es que en ese registro las palabras son indefinibles
o quieren decir cosas siempre diferentes, según las circunstancias.