Por Daniel Link para Perfil
Habíamos abandonado los dulces campos
y vueltos a la patria, nos encontramos con una marea de violencia que
lo cubre todo. Desde los más pequeños gestos en el aeropuerto, la
insolencia del tráfico camionero en las autopistas, hasta los más
escandalosos episodios de odio y de fantasías de exterminio.
Muertos. Y sobre todo: muertas, muertas, muertas. La década ganada,
pienso, en un día tan peronista. Las declaraciones de los políticos
en competencia son todas vacuas, insultantes, y sólo pretenden ganar
el lance del momento. Mi mamá se lamenta de que su jardinero le
anticipó que si gana Macri, a quién él va a votar, dejará de
cortarle el pasto. Su otro handyman, quien de tanto en tanto
le arregla los desperfectos eléctricos y la plomería, en cambio,
pronostica que el ballotage
será entre Massa (a quien votará) y Scioli. Mi mamá, que acata con
mal humor la herencia macabra que su adorada Cristina le impuso, no
entiende cómo es que ellos se atreven a dar un paso hacia el abismo
de tal magnitud. ¿No será, le digo, que no hay demasiada diferencia
entre esos tres candidatos de derecha, que desdeñan por igual la
educación como mecanismo inhibitorio a la potencia de muerte que nos
domina?
No termino de articular esa pregunta y
ya la policía bonaerense está reprimiendo manifestaciones de
mujeres (ménades, si se quiere, en la mejor tradición mitológica)
y ya están asesinando a Diana Sacayán, nuestra amiga, a quien
extrañaremos. Dentro de poco, tocarán, brechtianamente, a nuestras
puertas.
¡Qué bueno sería si la mayoría de la gente se diera cuenta de que los tres candidatos son de derecha!
ResponderBorrarAhora, el odio no es sólo argentino. ¿Qué opina de la nueva película Alemana "Ha vuelto"? (http://www.imdb.com/title/tt4176826/?ref_=fn_al_nm_1a) Me parece que eso es educación para el odio y la muerte.
El actor dijo "Me vestí como Hitler y la gente estaba muy feliz de verme". (¡Madre mía!)