sábado, 28 de febrero de 2009
Socorro y rebelión
El presidente de los Estados Unidos prometió más dinero para bancos en problemas y destacó que su su equipo está trabajando para recortar gastos (dos trillones de dólares en los próximos 10 años). En Letonia, al otro lado del mundo, los manifestantes arrancaron adoquines de las calles para tirárselos por la cabeza a los funcionarios que aprobaron programas de socorro para las entidades financieras (contraparte: reducciones salariales masivas, despidos y deterioro de los servicios sociales). En Grecia, los agricultores y los estudiantes protestaron en conjunto contra los treinta y cinco mil millones de euros destinados por el gobierno al rescate bancario (a costa de la reducción de las jubilaciones y pensiones y la desaparición de los subsidios a la actividad agropecuaria). En Francia, en Canadá, en Alemania y en Argentina todo el mundo ve con sorpresa y un poco de asco la prisa con la que los gobiernos se apresuran a recortar programas sociales, derechos de los trabajadores, fondos de salud, educación, jubilaciones y pensiones para cubrir el derrumbe del sistema financiero (léase: la negativa de los holdings más poderosos a seguir financiando la producción y el consumo: ¿para qué, entonces, existirían?).
¿El capitalismo se contrae? Más bien parece una contracción de parto de la que nacerá un monstruo todavía más incivil y menos gobernable, un mundo más injusto en donde la ciudadanía será sistemáticamente expoliada para favorecer a los usureros del mundo. Políticas de reducción de gastos, austeridad: eso se dice. En realidad se trata de la más formidable transferencia de recursos del sector productivo al sector financiero de la que se tenga memoria. No en vano el presidente del apocalipsis insistió en que su país “saldrá fortalecido de la crisis”. Pareciera que le sirvieron la debacle para que fortaleciera lo que se quiere fortalecer (la lacra del mundo) y debilitar todo lo otro (lo viviente): ¡recortemos, recortemos!
Pero el setenta y ocho por ciento de los griegos apoyan a los campesinos y el setenta por ciento de los franceses adhirió a la huelga general contra Sarkozy y su política de reducción de los planteles docentes. En Argentina no hay estadísticas fiables, pero un caudillo peronista acaba de señalar que “tiene que rebelarse América Latina, como también África y Asia; no tenemos nada que ver en esto, no tenemos por qué ser perjudicados en esto". O Duhalde se volvió kleiniano (por Naomí Klein), o sabe que las papas queman.
viernes, 27 de febrero de 2009
Boogie, el aceitoso
- Por donde te parezca más cómodo...
- Hoy da para elegir, porque como es viernes no hay piquetes -lo que quiere decir que el conductor quiere charlar y no interpreta mi respuesta como operador conversacional de cierre; lo de los piquetes, naturalmente, supone un juicio político con el cual no tengo ganas de engancharme; de todos modos, se revelará un pronóstico desacertado: habrá marcha en Avenida de Mayo rumbo a la plaza-. ¿9 de julio o Piedras?
- Vayamos por 9 de julio, entonces, que están los árboles florecidos -en un intento por subrayar mi sensibilidad enfermiza hacia las cosas más inútiles del mundo.
(...)
- Acá saqué mi primer registro, hace treinta años. A los 18 años lo saqué... -O sea, calculo, tiene 48 años. Luce bien. Anteojos oscuros, vestimenta prolija, pelo cortado a cero, el auto impecable: lo que en otras épocas se habría llamado "un buen partido" para ciertos narradores que sostienen ciertos libros (Burundanga, por ejemplo, de próxima aparición).
- ¿Acá se saca el registro? -interesado porque la próxima vez que tenga que renovarlo tendré que hacerlo en la Ciudad Autónoma.
- Noooo, ya no. Ahora es en Xxxx -una calle de cuatro letras que no recuerdo.
- Ahhhhh.
- O pagás la cuota del Automovil Club y lo sacás ahí.
- Ah sí, sabía. Ahí saqué el Registro Internacional. Una vez.
- Sí, yo también... Para irme a Australia -los jóvenes pueden ignorarlo, pero el "destino australiano" fue una opción entre los migrantes argentinos que creían que en el otro culo del mundo tal vez encontraran mejores chances de supervivencia.
- Australia, qué loco.
- Sí, una ciudad -nunca dijo cuál- horrible. Y la gente es refría -a partir de aquí, uso la forma monólogo, porque mis intervenciones fueron todas ellas insignificantes-. Reeefría. Nadie te habla, nadie. Nadie te dice nada. Los taxis van con el vidrio en el medio. Les decís a dónde querés ir por el micrófono. Pagás por la ventanita. Esto, conversar, ni ahí. Todos latinos, los taxistas, allá...
- Me mandaron al culo del mundo... Para hacer el curso de supervivencia que me faltaba para jubilarme en Naciones Unidas... Te mandan acá, allá, a Somalía, condiciones extremas... pobreza... "cursos de supervivencia". A mí me faltaba uno para poder jubilarme. Y me mandaron a Australia, dos meses... Si habré viajado... De acá para allá. Tengo seis hijos: cada vez que volvía le hacía un hijo a mi mujer. Al final, me jubilé. Ahora éste es mi cable a tierra... Es que no se puede seguir... La vez pasada me llegó una carta. Para ir a Beirut. 50.000 dólares por mes, me decían. Pero no... Yo ya tengo 52 años, y los hijos no quieren que me vaya... Igual no es que te vayan a mandar al frente ni nada... Ellos quieren que les entrenes a los nuevos. Vienen los pendejos y les viene bien alguien con experiencia... Alguien que les cuente cómo es lo que no pueden hacer los ejércitos regulares. Tampoco Naciones Unidas, pero ellos por eso se fijan en el expediente: quién se jubiló, los amigos, la disponibilidad, qué onda. Y ahí te llaman para que hagas el trabajo sucio. Les dije que no... Además, las últimas veces me pasaba 15 meses afuera y 8 en casa. Cuando volvía me encerraba en un cuartito de arriba y no podía casi ni salir a comer. Dos semanas, me duraba... Mi hija preguntaba: "¿qué le pasa a papá?". "Está trabajando", le contestaba mi mujer. No aguantaba las voces, los ruidos. Ahora éste es mi cable a tierra. ¿Te dejo acá o cruzando?
Todo el año es carnaval
El influyente diario Folha de Sao Paulo se lanzó de lleno a la invención histórica (y léxica).
El 17.2, en editorial, se lee:
Mas, se as chamadas "ditabrandas" -caso do Brasil entre 1964 e 1985- partiam de uma ruptura institucional e depois preservavam ou instituíam formas controladas de disputa política e acesso à Justiça-, o novo autoritarismo latino-americano, inaugurado por Alberto Fujimori no Peru, faz o caminho inverso. O líder eleito mina as instituições e os controles democráticos por dentro, paulatinamente. Em dez anos de poder, Hugo Chávez submeteu, pouco a pouco, o Legislativo e o Judiciário aos desígnios da Presidência. Fechou o círculo de mando ao impor-se à PDVSA, a gigante estatal do petróleo.
Fernando Barros, columnista, responde dias despues:
CERTAMENTE não é a primeira vez que um colunista da casa diverge de uma posição expressa pelo jornal em editorial. Mas é a primeira vez que este colunista se sente compelido a tornar pública sua discordância, inclusive em nome do que aprendeu durante 20 anos nesta Folha. O mundo mudou um bocado, mas "ditabranda" é demais.
O argumento de que, comparada a outras instaladas na América Latina, a ditadura brasileira apresentou "níveis baixos de violência política e institucional" parece servir, hoje, para atenuar a percepção dos danos daquele regime de exceção, e não para compreendê-lo melhor. O que pretende ser um avanço analítico parece, mais do que um erro, um sintoma de regressão.
Algumas matam mais, outras menos, mas toda ditadura é igualmente repugnante. Devemos agora contar cadáveres para medir níveis de afabilidade ou criar algum ranking entre regimes bárbaros? Por essa lógica, chega-se à conclusão absurda de que o holocausto nazista não passou de um "genolight" perto do extermínio de 20 milhões promovido por Stálin. Ora, se é verdade que o aparelho repressivo brasileiro produziu menos vítimas do que o chileno ou o argentino, isso se deu porque a esquerda armada daqui era menos organizada e foi mais facilmente dizimada, não porque nossos militares tenham sido "brandos". Quando a tortura se transforma em política de Estado, como de fato ocorreu após o AI-5, o que se tem é a "ditadura escancarada", para falar como Elio Gaspari. Seria um equívoco de mau gosto associar qualquer tipo de "brandura" até mesmo ao que Gaspari chamou de "ditadura envergonhada", quando o regime, entre 64 e 68, ainda convivia com clarões de liberdade, circunscritos à cultura.
Brandos ou duros, o fato é que os regimes autoritários só mobilizam a indignação de grande parte da esquerda quando não vêm acompanhados da retórica igualitarista.
Muitos intelectuais se assanham agora com a tirania por etapas que Chávez vai impondo à Venezuela sob a gosma ideológica da revolução bolivariana. Isso para não lembrar o fascínio que o regime moribundo mas terrível de Fidel Castro ainda exerce sobre figurões e figurinhas da esquerda nativa.
É bem sintomático, aliás, que, ao protestar contra a "ditabranda" em carta à Folha, o professor Fábio Konder Comparato, guardião do "devido respeito à pessoa humana", tenha condenado os autores do neologismo a ficar "de joelhos em praça pública" para "pedir perdão ao povo brasileiro". Que coisa. Era assim, obrigando suas vítimas a ajoelhar em praça pública, submetendo-as à autêntica "tortura chinesa", que a polícia política maoísta punia desvios ideológicos durante a Revolução Cultural. Quem sabe, como a "ditabranda", seja só um palpite infeliz.
Un lector agrega:
"Golpe de Estado dado por militares derrubando um governo eleito democraticamente, cassação de representantes eleitos pelo povo, fechamento do Congresso, cancelamento de eleições, cassação e exílio de professores universitários, suspensão do instituto do habeas corpus, tortura e morte de dezenas, quiçá de centenas, de opositores que não se opunham ao regime pelas armas (Vladimir Herzog, Manuel Fiel Filho, por exemplo) e tantos outros muitos desmandos e violações do Estado de Direito. Li no editorial da Folha de hoje que isso consta entre "as chamadas ditabrandas -caso do Brasil entre 1964 e 1985" (sic). Termo este que jamais havia visto ser usado. A partir de que ponto uma "ditabranda", um neologismo detestável e inverídico, vira o que de fato é? Quantos mortos, quantos desaparecidos e quantos expatriados são necessários para uma "ditabranda" ser chamada de ditadura? O que acontece com este jornal? É a "novilíngua"? Lamentável, mas profundamente lamentável mesmo, especialmente para quem viveu e enterrou seus mortos naqueles anos de chumbo.
É um tapa na cara da história da nação e uma vergonha para este diário."
SERGIO PINHEIRO LOPES (São Paulo, SP)
Y el prudente diario responde:
Nota da Redação - Na comparação com outros regimes instalados na região no período, a ditadura brasileira apresentou níveis baixos de violência política e institucional.
Ahora,
Intelectuais lançam manifesto, na internet, de repúdio ao jornal Folha de S. Paulo
Manifesto protesta contra um editorial publicado quatro dias antes pelo jornal, que minimiza os crimes da ditadura militar e classifica o período como "ditabranda". O texto também presta solidariedade aos professores Fábio Konder Comparato e Maria Victória de Mesquita Benevides, cuja indignação ao editorial foi classificada como "cínica" e "mentirosa" pela Folha.
SÃO PAULO - Um grupo de intelectuais brasileiros lançou sábado (21) um abaixo-assinado na internet em repúdio à Folha de S.Paulo. O manifesto protesta contra um editorial publicado quatro dias antes pelo jornal, que relativiza as atrocidades da ditadura militar (1964-1985) e classifica o período como "ditabranda".
O texto condena "o estelionato semântico manifesto pelo neologismo 'ditabranda' e, a rigor, uma fraudulenta revisão histórica forjada por uma minoria que se beneficiou da suspensão das liberdades e direitos democráticos no pos-1964". Segundo os signatários do manifesto, "a direção editorial do jornal insulta e avilta a memória dos muitos brasileiros e brasileiras que lutaram pela redemocratização do pais".
Outra motivação do abaixo-assinado foi prestar solidariedade aos professores acadêmicos Maria Victória de Mesquita Benevides e Fabio Konder Comparato, cuja legítima indignação ao editorial foi tachada de "cínica" e "mentirosa" pela Folha. "Pela luta pertinaz e consequente em defesa dos direitos humanos, Maria Victoria Benevides e Fábio Konder Comparato merecem o reconhecimento e o respeito de todo o povo brasileiro", diz o texto.
A íntegra do manifesto é a seguinte:
"Ante a viva lembrança da dura e permanente violência desencadeada pelo regime militar de 1964, os abaixo-assinados manifestam seu mais firme e veemente repúdio à arbitrária e inverídica “revisão histórica” contida no editorial da Folha de S. Paulo do dia 17 de fevereiro último. Ao denominar “ditabranda” o regime político vigente no Brasil de 1964 a 1985, a direção editorial do jornal insulta e avilta a memória dos muitos brasileiros e brasileiras que lutaram pela redemocratização do país.
Perseguições, prisões iníquas, torturas, assassinatos, suicídios forjados e execuções sumárias foram crimes corriqueiramente praticados pela ditadura militar no período mais longo e sombrio da história política brasileira. O estelionato semântico manifesto pelo neologismo “ditabranda” é, a rigor, uma fraudulenta revisão histórica forjada por uma minoria que se beneficiou da suspensão das liberdades e direitos democráticos no pós-1964.
Repudiamos, de forma igualmente firme e contundente, a “Nota de redação”, publicada pelo jornal em 20 de fevereiro (p. 3) em resposta às cartas enviadas à seção “Painel do Leitor” pelos professores Maria Victoria de Mesquita Benevides e Fábio Konder Comparato. Sem razões ou argumentos, a Folha de S. Paulo perpetrou ataques ignominiosos, arbitrários e irresponsáveis à atuação desses dois combativos acadêmicos e intelectuais brasileiros. Assim, vimos manifestar-lhes nosso irrestrito apoio e solidariedade ante às insólitas críticas pessoais e políticas contidas na infamante nota da direção editorial do jornal.
Pela luta pertinaz e consequente em defesa dos direitos humanos, Maria Victoria Benevides e Fábio Konder Comparato merecem o reconhecimento e o respeito de todo o povo brasileiro".
Da Agência Carta Maior
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jueves, 26 de febrero de 2009
La prometida
Dice Nicole Denkberg, una descendiente de israelí que apoya a los palestinos. Es hija de judío y madre cristiana. Tiene 27 años y hace tres emprendió un viaje a Israel para conocer sus raíces. Allá su vida dió un vuelco radical y hoy, desde Chile, defiende la causa palestina. Sus amigos ahora la odian.
Por Pamela Palma para The Clinic
Mi padre es judío pero como mi madre no lo es, no soy considerada judía. Mis papás se separaron cuando era pequeña, él se fue a Israel y crecí con mi vieja. Pero por la influencia de mis primos y parientes paternos, desde niña que estaba en el bando israelí, y me encantaba ser parte de ese mundo. Siempre soñé con conocer Israel y a los 20 años empecé a estudiar sobre mis orígenes judíos, la religión y el país. No sé si era fanática, pero estaba súper metida. Iba a las sinagogas, estudiaba hebreo. En ese tiempo me enteré de la Ley del Retorno que hay en Israel para todo judío, hijos de judíos y nietos que quieran “volver” a su tierra.
Como soy judía por halaja, es decir, no nacida de vientre judío, quería hacer mi conversión al judaísmo y qué mejor que allá. En julio de 2005 viajé a Jerusalén con todos los gastos pagados y una beca estatal. Llegué a Ulpan Etzión y allí viví cinco meses. Ulpan es una especie de instituto para aprender hebreo en que había chicos de todo el mundo buscando lo mismo que yo.
En ese entonces, en el país se vivía el período de la desconexión de terrenos ocupados. Todo se dividía entre el color naranja, que eran los que apoyaban la ocupación en territorios palestinos, y los azules, que apoyaban el desalojo. Yo no entendía mucho, no hablaba inglés y menos hebreo.
Recuerdo que un día fuimos a Neviot, al sur de Jerusalén, a construir, en territorios palestinos, unos viveros que estaban instalando unos judíos desalojados. Pero sólo fue un día.
En ese tiempo creo que Ariel Sharon caía enfermo y como Presidente estaba Moshe Katsav. Yo ya había empezado a analizar el tema respecto a la desconexión. Me lo plantié muchas veces y llegué a la conclusión que si bien los judíos estaban ocupando terrenos que no eran de ellos, tenían una gran vida allí, llenos de plantaciones y bellas casas. Me parecía cruel sacarlos y matar el trabajo de años. Yo estaba por el color naranja, pero a medida que pasó el tiempo, todo cambió.
Sigue acá.
miércoles, 25 de febrero de 2009
Partes de guerra
por Damián Tabarovsky para Perfil
Alguna vez Michel Foucault vaticinó que “el siglo XXI será deleuziano”. Es una de esas frases menores de algún autor mayor. Sin embargo, quién sabe, quizá tenga razón. Hace un par de semanas, Osvaldo Baigorria publicó un muy interesante artículo en Radar que va en esa dirección. La nota da cuenta del uso de textos de Deleuze y Guattari, como Mil mesetas, por parte del ejército israelí.
lunes, 23 de febrero de 2009
Momentos inolvidables
De todos modos, la ceremonia, que intentó quebrar la curva de decadencia, tuvo sus momentos encantadores: los musicales de Hugh Jackman (faltó uno, a torso desnudo), los pedazos de vidrio verde que portaba Angelina Jolie (y que debían ser esmeraldas compradas por kilo), la elegancia sobrehumana de Tilda Swinton y el premio otorgado a nuestro compatriota Santiago Vega con uno de sus tantos seudónimos, A. R Rahman:
Este año, la planilla de participación costaba $ 10 y, si bien no gané, quedé como primera princesa y evité la humillación de Miss Simpatía o, todavía peor, Asistencia Perfecta, que venían siendo mis lamentables resultados en años anteriores.
sábado, 21 de febrero de 2009
Fotogenia electoral
La foto es siniestra. En el centro, un empresario que, luego de administrar un club de fútbol, consideró que estaba habilitado para gobernar una ciudad. Algunas lecciones del Cardenal Newman, parece, se le escaparon (inglés, etiqueta): aunque está sentado no se ha desabrochado el saco, lo que tal vez explique que sus hombros se vean mucho menos anchos que sus caderas (la sabiduría popular relacionó ambas dimensiones, para referirse a quienes llegan a un lugar no por sus méritos intelectuales sino por buena suerte). A diferencia de sus compañeros de foto, mira hacia la izquierda (su derecha) con la típica sonrisa socarrona que le ha valido el mote de “zorrito de peletería” entre las personas de Barrio Norte.
A su derecha, un estanciero de la provincia de Buenos Aires tiene el rostro descompuesto, como si estuviera gritándole a la china que le caliente el mate. Una ceja más levantada que la otra, su mirada se dirige levemente hacia la derecha (su izquierda).
El más cómodo parece el que se hizo de una fortuna personal arrebatándole a su hermano los negocios familiares heredados de los abuelos checos. Eso no pudo aprenderlo en el Newman (no terminó la secundaria). Mira a cámara y sonríe, ignorante de que su exótico color de pelo tal vez constituya un escollo político para los prejuiciosos votantes.
Como fondo, el logo de un hotel de cinco estrellas de la ciudad de Buenos Aires aruina el efecto de la tapicería y los alfombrados y dice que para ellos esa publicidad no es ofensiva.
Acaban de sellar una alianza sin ninguna virtud, con la sola idea de que en en país como el nuestro, donde la política es una carnestolenda de la que los nobles y los justos por convicción se abstienen, cualquier aventurero (ellos son tres) puede alzarse con una elección legislativa.
Fuente: DyN
viernes, 20 de febrero de 2009
César Aira Talk Show
Ahora, abandonado, pero no olvidado, recupero (gracias a las páginas de Andrés Di Tella) un rol que no resignaré ni a palos.
Comida libanesa
Es el chico del momento, y es imposible no quererlo (pero no temas, hopeless, mi corazón te sigue perteneciendo). Hollywood ya se encargará de arruinarlo.
Señoras y señores, Haaz Sleiman:
jueves, 19 de febrero de 2009
Causas perdidas
Yo me niego enérgicamente, pero cada día que pasa él agrega una pieza más a su argumentación torcida: además de la presencia del monstruo (Meg Ryan), pone en la balanza a su favor otra cara irreconocible, la de Annete Bening. Opongo a su curiosidad malsana, la presencia de la intolerable Debra Missing. A él le gusta el poster con imágenes superpuestas. Yo pienso que podrían haberlo hecho con un poco más de sentido (pero, tratándose de esta película, sería pedir demasiado).
Cuando he conseguido casi convencerlo (a fuerza de amenazas) recurre a la letra chica: Bette Midler, Candice Bergen, ¡¡Carrie Fisher!!
Reconozco que semejante casting revela una mente profundamente perturbada, pero ni aún así estoy dispuesto a ceder. Ya la veremos cuando Cinecanal la programe...
martes, 17 de febrero de 2009
Cuenta regresiva
Kate no tiene que contarle a nadie lo que le ha pasado (ni siquiera a nosotros) antes de naufragar en una isla incomprensible, porque la vemos en un flashback (en realidad, en varios). Sí, Kate es presentada como una víctima de la cultura norteamericana, que ha insistido siempre en que el crimen, arma en mano, es la única manera de salir del infierno. Kate ha matado. Kate ha devenido Pepita la Pistolera (o lo que se quiera). Contra lo que algunos suponen, ese rasgo no la abandonará ya nunca y en la quinta temporada, cuando su presente es el de una madre soltera acomodada, ante la primera contrariedad saca un puñado de cash del lugar donde esconde los dólares de emergencia y una pistola cargada con la que no dudará en matar a quien se interponga en su camino. Kate es "capaz de tomar decisiones difíciles", y así se lo dice Sun, cuando la visita en Los Ángeles, en un diálogo que vuelve a recurrir al flashback, esta vez muy acotado, para evitar peroratas inútiles. "Pero... ¿quién te crees que soy?", había protestado Kate. Sabemos de qué estamos hablando, dice Sun. No te hagas la mosquita muerta, dice.
Las analepsis, además de funcionar en relación con una determinada economía narrativa, tienen en Lost un valor teórico a propósito del relato y una función de shifter. En cuanto al relato, sirven para decir que toda historia está siempre horadada (incluso, que la Historia es lo agujereado) y que esos huecos de sentido son los que sostienen la intriga: ¿pero entonces...?, ¿será que....?, etc. El sentido no está en lo que se presenta sino en lo que es impresentable: el sentido es el trazo de una ausencia. Lost hace de lo no dicho una regla dorada y una política ciertamente exasperante. Creo que fue al final de la tercera temporada y sobre todo en la cuarta y en la quinta (la actual), cuando esos saltos temporales fueron incorporados a la diégesis.
El resultado es el mismo, sólo que ahora justificado en un pormenor de la trama. No, no es el mismo: las dos primeras temporadas de Lost fueron extremadamente morosas (incluso, aburrían cuando la analepsis hacía foco en un personaje poco interesante). Después el ritmo comenzó a acelerarse porque las retrospecciones (y las prospecciones, de las que seguramente llegaremos a ver alguna, pero que todavía han estado ausentes) eran, ellas mismas, mucho más breves. El final de la tercera temporada es, en ese punto, decisivo, porque cambió la perspectiva temporal completa del relato (ojo: Lost es diferente de todas las demás series no sólo porque es de una inteligencia que abruma sino porque, además, no es episódica. Dexter, Héroes, la estúpida True Blood plantean ciclos narrativos largos, pero que se agotan en cada temporada. Nada que ver con Lost, que hace cinco años sostiene el mismo relato y los mismos enigmas). Como el silencio, lo impresentable y lo no dicho constituyen la política del sentido que Lost sostiene, sería ingenuo que esperáramos que un buen día Ben o Daniel (o Jacob) se sentaran a explicarnos que pasó. Lo que pasó, lo sabremos nosotros antes y mejor que los demás personajes, aunque lo sabremos imperfectamente, por aproximación y deducción.
¿Cuál es el presente del relato en Lost? Hasta la próxima pirueta narrativa, coincide con el nuestro: tres años después del accidente, tal como se señala en los antes nunca usados cartelitos que incluye la quinta temporada ("tres años después", "tres años antes"). Hay una escena especialmente elaborada para marcar el hiato temporal: cuando Sayid asesina a los perseguidores de Hurley en el motel, los vecinos le toman al gordo una foto con sus celulares. Esa sencilla operación tecnológica habría sido imposible hace tres años. Otra serie, de la que no veo sino las publicidades, también optó por saltar hacia el futuro. Pero el mal tino de los guionistas de Desperate Housewifes, que decidieron avanzar cinco años, hace del relato (debería hacer, si hubiera coherencia) una ficción futurista: dentro de cinco años (porque hasta ahora, Desperate Housewifes transcurría en puro presente, en tiempo real). Los guionistas de Lost, por el contrario, se tomaron el trabajo de marcar el salto temporal mediante una escena que, de otro modo, habría resultado banal (insignificante). El presente de Lost, entonces, es el nuestro (en la isla y fuera de ella).
Las semanas posteriores al accidente (lo que constituía el presente narrativo hasta la tercera temporada) es ahora totalmente retrospectivo. Para aumentar todavía más el vértigo, los guionistas han hecho que la isla (en fin: el grupo de sobrevivientes) vaya y venga a través de los estratos temporales. Y como si eso fuera todavía demasiado "transparente", los saltos se repiten según el personaje en el que se focalice. Los del quinto capítulo, que afectan a un náufrago en segundo grado (un dos veces náufrago), coinciden con los que ya habíamos visto en los capítulos previos desde la perspectiva de otros personajes: lo que se agregan son datos que permiten situar el momento (vemos a Rousseau, joven y todavía embarazada, cuando encalla en la isla con sus amigos).
En algún sentido, el random de los saltos temporales se revela un poco dañado porque siempre lleva a los personajes a tiempos significativos.
La retrospección del primer capítulo de esta temporada fue puramente enunciativa (no se deducía de ningún pormenor de la diégesis, al menos. de lo que hasta ahora hemos visto, pero todo puede cambiar). Las demás, sí. De modo que se produce un encastramiento entre dos formas de presentar las retrospecciones: algunas son puramente formales (narrativas), otras están justificadas en la historia (fatalmente, los personajes se encontrarán con ellos mismos en el pasado: Sawyer, en gloriosa escena, ve a Kate convertida en improvisada partera en el momento en que Aaron está naciendo, así como el personaje al que me referí recién se encuentra con Rousseau). En todo caso, se trata de presentar alguna información necesaria para que comprendamos qué es la isla, quiénes los que se la disputan, y para que podamos resolver tantos misterios (los números, el humo asesino, la sempiterna juventud de Richard Alpert, la ubicuidad de la casa de Jacob, la poderosa fuente de energía, las premoniciones de ciertos personajes: la "madre de Daniel", etc).
El relato es un espacio agujereado: esos agujeros, lo que nos falta saber (el saber como falta), es lo que ahora empieza a suceder (fragmentariamente, según la lógica del disco rayado) ante nuestros ojos. No hacen falta explicaciones. Lo que pasó, lo que pasará, lo que hubiera pasado, lo que habría de suceder nos será mostrado en las apenas treinta horas que faltan para que Lost termine para siempre. Treinta, tic, horas, tac, son, tic, las, tac, que, tic, nos, tac, separan, tic, de la, tac, palabra, tic, "fin".
lunes, 16 de febrero de 2009
Preguntan si...
Entrevista a Daniel Link, por Juan Ignacio Pereyra y Carlos Torrengo para el Diario de Río Negro
-Que la gente lee menos por internet es un lugar común que no está demostrado, ¿no?
-Las estadísticas que conozco y algunas que he estudiado tienen que ver con que el tiempo de conexión a internet no compite necesariamente con la lectura sino con el tiempo sentado frente a la televisión. En ese punto aplaudo que la gente vaya a internet en lugar de a la televisión, que es una porquería.
-¿Hay algo de ternura en la relación con el libro?
-Sí. Me parece que el soporte libro es mucho más amoroso y tierno. Inclusive, más portable. Con el libro no necesito conexión a internet ni electricidad; con un poco de luz me puedo ir a una plaza a leer un libro cualquiera. En ese punto el libro sigue siendo mucho más accesible y menos dependiente de otros factores.
La entrevista completa puede leerse acá.domingo, 15 de febrero de 2009
El best-seller del verano
por Beatriz Sarlo para Perfil
Fiel a esta heterotopía del Saber, la narradora tiene siempre un libro a mano para fregarlo contra el hocico de su gata en un gesto de didactismo mimético; o para contar una performance porno-underground o un trip de pastillas y polvos diversos en una disco. Las teorías (antropológicas, psiquiátricas, filosóficas, tecnológicas) fascinan, pero también son instrumentos para escribir una novela que yo no llamaría filosófica, sino de aprendizaje, no una “educación sentimental” sino una educación a secas. Las teorías (antropológicas, psiquiátricas, filosóficas, tecnológicas) fascinan, pero también son instrumentos para escribir una novela que yo no llamaría filosófica, sino de aprendizaje, no una “educación sentimental” sino una educación a secas.(...)
La mezcla de bizarros, nerds y beautiful people produce un tratado de microetnografía cultural más convincente que los que resultan de las pasiones teóricas. Las teorías salvajes están allí.
El texto completo, acá.
Foto: Sebastián Freire
"una mujer joven y bella (narradora, personaje, conste que no digo autora)" (B. S.)
sábado, 14 de febrero de 2009
No todo es carnaval
Estamos ya en febrero, un mes extraño, mero intervalo temporal entre un año y otro. El vacío estival comienza a llenarse lentamente de las complicaciones laborales del otoño y el invierno: en mi bandeja de correo ya se acumulan demandas de tal o cual cosa que más tarde o más temprano tendré que responder, y las urgencias de un año electoral seguramente nos obligarán a ejercicios menos elegantes de imaginación que las etimologías a las que me entregué durante el mes de enero, para descansar de los senderos que atraviesan el grave jardín de la política local o el todavía más sombrío de la irremediable marcha del capitalismo hacia su ruina.
Febrero es el mes del “todavía no”, pero también del “ya no más”, apenas un umbral, un vórtice de decisiones postergadas. No por azar, febrero es el mes del carnaval, del carnevale (de bajo latín carne levamen), que tanto puede querer decir adiós (vale) a la carne o que todavía podemos, antes de la cuaresma, disfrutar de ella.
En la época previa a la reforma del calendario que promovió Julio César, el año romano tenía diez meses de 36 días, contados a partir de marzo (por Marte). Aquel ordenamiento arcaico explica los nombres de los meses de septiembre (el séptimo), octubre (el octavo), noviembre (el noveno) y diciembre (el décimo). Julio César hizo que los meses fueran doce y tuvieran 30 o 31 días según fueran pares o impares.
Febrero viene de februarium, el mes de las purificaciones y de las fiestas Lupercales (febrare es purificar), destinadas a aplacar las sombras de los muertos y a propiciar la benevolencia de los habitantes del Infierno (parece que nuestro carnaval, que al principio coincidía con las Saturnales, terminó superponiéndose con las Bacanales y las Lupercales). Esas celebraciones también se conocían como fiestas de la februa, nombre de las tiras de cuero de macho cabrío (el aker de los akelarres celtas) con las que los celebrantes azotaban sobre todo a las mujeres (con la idea peregrina de que tal tratamiento facilitaría el parto). El novísimo mes del calendario juliano tenía 29 días (y 30 los años bisiestos).
En honor del general romano, el partido cesariano propuso que, a partir de la reforma, el mes quinto (según la denominación republicana) se llamara Julio. Su sucesor, el fascistoide Octavio, no vio con buenos ojos que se homenajeara su título (augustus, emperador) con un mes (el sexto, según el antiguo ordenamiento) de menos días que el que honraba a su predecesor asesinado. Octavio Augusto robó de febrero una jornada y se la agregó a agosto y, para evitar la monotonía de tantos meses seguidos de más de treinta días, modificó la alternancia de los meses sucesivos. El día que nos falta de febrero y el que le sobra a agosto son producto de la vanidad y el abuso de la fuerza imperial.
En estos días pasados hemos visto crecer la materia de futuras elucubraciones: Tartagal fue arrasada por un alud de barro, asumió el presidente del Apocalipsis (con un discurso no muy diferente del de su predecesor), circuló una foto fraguada de Fidel Castro, se conmemora un aniversario de la muerte de Cortázar, una mancha en el río Uruguay resultó ser una formación bacteriana y no contaminación ambiental, personas de letras renunciaron a la SEA (Sociedad de Escritores de Argentina) en solidaridad con el Estado de Israel, empezó la quinta temporada de Lost, y la sequía terminó.
A propósito de lo último, Martín Kohan desarrolló una metáfora libresca. Quién sabe. Tal vez todavía nos toque “pasar más hambre que meretriz en cuaresma".
viernes, 13 de febrero de 2009
Noches de cine
Hablando de horror, se ha formado una pareja: hemos descubierto que Mickey Rourke (protagonista de la insufrible y decadente The Wrestler), con su boca de Moria Casán y sus tetas de telgopor, es un monstruo que bien podría acompañar del brazo a Meg Ryan, igualmente monstruosa. Los dos pasaron por procesos quirúrgicos faciales inverosímiles y apenas si pueden hablar o moverse. Viéndolos, no se entiende hacia donde va el mundo del cine (esa ilusión).
Dos serán, pues, los grandes temas de los Oscars de este año: la vejez y el amor hacia los niños. En otra película sin sentido, pero totalmente sin sentido (basada en un relato breve de un escritor borracho, Fitzgerald, que no merecería que se lo recordara por esta estupidez), Benjamin Bottom, vemos a Brad Pitt transitar una vida entre dos naderías: haber nacido viejo y morir como un bebé. Una premisa así de peregrina y así de idiota (¡a mí qué me importa!) para lo único que sirve (además de repetir los desatinos de Forrest Gump: el freak que se cruza con la Historia) es para mostrar los avances en tratamiento facial computarizado y en maquillaje. No sabemos qué es peor: si la cara maquillada de viejo de Brad Pitt insertada en un cuerpo deforme, o su cara blureada del final, cuando el actor fue obligado (por la producción, pero también por su incapacidad escénica) a musitar sus parlamentos insulsos sin mover un solo músculo). Espléndida, como de costumbre, Cate Blanchett (que incluso se da el lujo de aparecer como ballerina adolescente y como vieja moribunda a punto de ser arrastrada por Katrina). Lo demás, un bodrio (nada que ver con el bodriovil que tanto me gusta). Eso sí: un viejo se enamora de una niña y es correspondido, no importa la reversión temporal.
Actuaciones típicas: las de Doubt, con Meryl Streep y Phillip Seymour Hoffman paseándose a lo largo y a lo ancho de un guión anquilosado (creo que el origen es una obra de teatro, horrenda). Nos prestaron la película con la condición de que firmáramos un papel donde decía que la película atrasa treinta años. Lo hicimos y creo que los patrocinadores de la solicitada se quedaron cortos. Una monja intolerante persigue a un cura al que acusa de seducir a sus monaguillos. Muy buena la actuación de la madre (la negra que ganará la estatuilla a actriz de reparto este año) que le dice a la monja: "Y bueno, él necesita un hombre que lo quiera". Obvio, señora, obvio.
Ya que estamos con las nominaciones, la que va a ganar en el rubro mejor actriz protagónica es Kate Winslet, quien en su aparición como estrella invitada en la serie Extras se había quejado de que nunca ganaba y le decían: "porque nunca hiciste una película sobre el Holocausto". Dicho y hecho: The Reader. Kate hace un personaje raro que prefiere la cadena perpetua por matar judíos durante la guerra, cuando trabajaba para las SS, que confesar que es analfabeta. Entre los crímenes y el juicio, tiene un romance con un adolescente que le lee en alta voz, y que sostendrá, veinte años después (sí, Kate también envejece), el punto de vista narrativo. La película es o banal o revisionista (es decir: peligrosa), pero Kate Winslet no está gorda (lo que es un milagro) y hace con cierta solvencia la atonía y la estupefacción que se le requiere. ¡Bravo, bravo!
¿Qué decir de la última entrega de Woody Allen? Es como una película de Almodóvar, pero sacada del catolicismo y llevada al judaísmo (o a la versión protestante -laica- del judaísmo que Woody Allen gusta de patrocinar). Las mejores partes son las habladas en castellano por Bardem y Penélope Cruz (para mi gusto, bastante obvio, cogen menos de lo que los espectadores merecemos). Eso sí, parece que Woody Allen ha descubierto el viejo (¡viejísimo!) veredicto (que yo conozco por boca de María Moreno): "tres es una pareja, cuatro es un espectáculo". Basta ya, por supuesto, de indagaciones morales, Woody: sos más aburrido que chupar un clavo.
Batman: es un horror de seriedad fuera de contexto (finalmente, es una película infantil) y se empeñarán en darle al muerto ese un Oscar por hacer de psicópata sobremaquillado y sacando la lengüita cada tanto (que es como gritar: ¡Hollywood, Hollywood!).
No sé qué hacer con Milk: quiero tanto a Gus Van Sant como detesto las biografías heroicas. Mientras la veía rogaba para que mataran al protagonista (brillante, eso sí, Sean Penn), circunstancia que se conoce desde el comienzo.
Aclaración: no veo películas sobre Nixon ni, antes muerto, films en los que actúe el desagradable de Di Caprio, con esa cabezota que crece mes a mes y esas dotes actorales tan sobrevaloradas como totalmente ineficaces. NO VEO ESAS PELÍCULAS y bastante ha sido la tortura a la que me sometí para llegar al Oscar más o menos bien preparado para la competencia anual que organizamos ($ 10 la planilla y el ganador se lleva todo).
Días atras, cenando con un amigo de Franka Potente, en algún momento de la noche él llego a la conclusión (y así lo dijo) de que éramos "cinéfilos". "¡Qué esperanza!", le contesté. "Sólo miramos cine para corroborar lo muerto que está y poder seguir durmiendo tranquilos".
Odiamos el cine, porque amamos Lost (o viceversa).
jueves, 12 de febrero de 2009
miércoles, 11 de febrero de 2009
Correspondencia: Cortazariana
MINISTERIO DE CULTURA
GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
El Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Hernán Lombardi presentará mañana a las 15 hs. en el Anfiteatro de la Biblioteca Ricardo Güiraldes, la programación cultural organizada en homenaje a Julio Cortázar, a 25 años de su muerte. Acompañarán a Lombardi durante la conferencia la Subsecretaria de Cultura, Josefina Delgado, la Directora general del Libro y Promoción de la Lectura, Alejandra Ramírez y la artista plástica Marta Minujin, quien explicará la intervención urbana que realizará en la Av. 9 de Julio en el cierre del homenaje. La programación comenzará el 12 de febrero con el preestreno absoluto de la película “Mentiras piadosas” de Diego Sabanés. El film, protagonizado por Marilú Marini, Walter Quiroz, Rubén Szuchmacher, Lydia Lamaison y Víctor Laplace, está basado en el cuento “La salud de los enfermos”. El 21 marzo, concluirán las actividades con una intervención a cargo de la artista plástica Marta Minujin. La actividad consistirá en la instalación de 300 rayuelas para jugar en la Av. 9 de Julio y la única condición para participar será llevar una página o una frase de Cortázar.
PROGRAMA DE ACTIVIDADES:
JUEVES 12 DE FEBRERO
SEMINARIO I
IMÁGENES DE JULIO CORTÁZAR
Seminario para analizar la imagen literaria y la imagen cinematográfica inspirada en el universo Cortázar.
A cargo de Ricardo Parodi.
19 hs - Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
CINE
FUNCIÓN PREESTRENO DE “MENTIRAS PIADOSAS” DE DIEGO SABANÉS
Pablo viaja a París para tocar junto a unos amigos en un cabaret de poca monta. Las semanas pasan y nadie tiene noticias de él. La incertidumbre agrava el frágil estado de salud de su madre, por lo que sus hermanos deciden escribir cartas falsas y enviarle regalos, postergando el regreso. La ficción se ramifica involucrando a otros personajes, mientras la casa va siendo poco a poco desmantelada para afrontar las deudas que generan los envíos de París. Con Marilú Marini, Walter Quiroz, Rubén Szuchmacher, Lydia Lamaison y Víctor Laplace.
20:30 hs - Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
MARTES 17 DE FEBRERO
SEMINARIO II
IMÁGENES DE JULIO CORTÁZAR
Seminario para analizar la imagen literaria y la imagen cinematográfica inspirada en el universo Cortázar.
A cargo de Ricardo Parodi.
19 hs – Biblioteca Julio Cortázar – Lavalleja 924 – Villa Crespo.
CINE
PROYECCIÓN DEL FILM “EL OTRO CIELO” (1988) DE NINA GROSSE
Una noche de furia y espanto Julien sueña con el asesinato de una mujer, dentro de unas grandes galerías de cielo cubierto. Un cielo que engaña, un cielo que impide ver ese otro cielo, el verdadero. ¿Julien deberá cumplir con el mandato de su sueño; o el sueño simplemente fue el flash-back de algo que ya ha ocurrido?...
20:30 hs – Biblioteca Julio Cortázar – Lavalleja 924 – Villa Crespo.
VIERNES 20 DE FEBRERO
CORTÁZAR PARA CHICOS
CUENTOS SALTADOS PARA UNA RAYUELA
Espectáculo y taller para chicos/as de 5 a 12 años. Los cuentos se narran en el orden decidido por un salto de piedra. Juego con cielo, casa, turnos, instrucciones, palabras raras y palabras magas.
A cargo de Mercedes Pugliese.
18 hs - Biblioteca Enrique Banchs – Av. Caseros y Urquiza – Parque Patricios.
MIÉRCOLES 25 DE FEBRERO
CONFERENCIAS
LOS NIETOS DE JULIO CORTÁZAR
Elsa Drucaroff coordina esta mesa en la cual los escritores Gonzalo Garcés, Gustavo Nielsen y Patricia Suárez analizan la influencia de Cortázar en su propia obra.
19:30 hs – Biblioteca Julio Cortázar – Lavalleja 924 – Villa Crespo.
VIERNES 27 DE FEBRERO
CONFERENCIAS
CORTÁZAR: EL JUEGO Y EL CIELO ESCONDIDOS EN LA TIERRA
Cortázar y su idea neofantástica de la literatura, el enigma musical de Casa tomada. El manifiesto estético de El perseguidor. La otra novela y la otra humanidad de Rayuela.
A cargo de Esteban Ierardo.
19 hs – Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
SÁBADO 28 DE FEBRERO
CORTÁZAR PARA CHICOS
LA CUENTOGRAFÍA DE JULZAR
Una fama y un cronopio brindan una conferencia sobre la vida y obra de Julio Cortázar. Los personajes intercambian con humor un diálogo atravesado por los cuentos “La foto salió movida”, “Los venenos”, “Haga como si estuviera en su casa”, entre otros.
Dirección: Susana Zadoff. Elenco: Claudia Argüello, Martín Losa, Dina Markus y Claudia Trepat.
18 hs – Biblioteca José Mármol – Juramento 2937 - Belgrano.
MARTES 3 DE MARZO
TEATRO
LA UNICA MANERA (DE CONTAR ESTA HISTORIA ES CON MANDARINAS)
Versión libre del cuento “Final del Juego”. La obra deja entrever un universo encerrado en sí mismo, inmutable, suspendido en el pasado y también en el presente de tres hermanas.
Dramaturgia y dirección: Ana Lidejover y Melisa Hermida. Actrices: Ana Scannapieco, Sabrina Gómez y Magdalena Grondona.
20:30 hs – Anfiteatro de la Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
MIÉRCOLES 4 DE MARZO
LECTURAS Y MÚSICA
AMAMOS A CORTÁZAR I
Veladas románticas. Santiago Llach y Damiana Alonso, Natalia Santiago y Federico Barroso Lelouche, Bárbara Belloc y Daniel Junowicz, Luciana Rabinovich y Paolo Baseggio interpretarán una selección de poemas, cuentos y fragmentos de las novelas de Julio Cortázar en las que sólo se habla de amor.
Músicos invitados: Dúo escalante-pesci. Saxo y clarinete: Pablo Pesci. Guitarra: Nazareno Escalante.
Coordina: Trinidad Baruf
20 hs – Anfiteatro de la Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
JUEVES 5 DE MARZO
LECTURAS
MARCELA FERRADÁS Y HORACIO PEÑA LEEN A CORTÁZAR
Lectura de fragmentos con los ecos que resuenan en Rayuela, la historia de amor entre la Maga y Oliveira. París. Una habitación. Un hombre y una mujer con su hijo.
19 hs - Anfiteatro de la Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
VIERNES 6 DE MARZO
CINE
SEGUNDA FUNCIÓN PREESTRENO DE “MENTIRAS PIADOSAS” DE DIEGO SABANÉS.
Pablo viaja a París para tocar junto a unos amigos en un cabaret de poca monta. Las semanas pasan y nadie tiene noticias de él. La incertidumbre agrava el frágil estado de salud de su madre, por lo que sus hermanos deciden escribir cartas falsas y enviarle regalos, postergando el regreso. La ficción se ramifica involucrando a otros personajes, mientras la casa va siendo poco a poco desmantelada para afrontar las deudas que generan los envíos de París. Con Marilú Marini, Walter Quiroz, Rubén Szuchmacher, Lydia Lamaison y Víctor Laplace.
20:30 hs - Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
SÁBADO 7 DE MARZO
NARRACIÓN
RELATOS, DE ANA MARIA BOVO
Viejas y nuevas historias. Un reencuentro con el placer perdido de que nos cuenten cuentos. Clásicos de su repertorio, con relatos de Cortázar e Isidoro Blaisten, entre otros.
19 hs - Anfiteatro de la Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
MARTES 10 DE MARZO
CONFERENCIAS
IMPACTO CORTÁZAR
Graciela Maturo, Luisa Valenzuela y Rodolfo Rabanal dibujan el contexto y recrean la producción y el impacto de Cortázar en los ´60.
Modera: Josefina Delgado.
19 hs - Biblioteca Ricardo Güiraldes – Talcahuano 1261 – Retiro.
MIÉRCOLES 11 DE MARZO
LECTURAS Y MÚSICA
AMAMOS A CORTÁZAR II
Veladas románticas. Mariela Ghenadenick y Pedro Mairal, Diego Rúa y Flavia Amato, Adriana Kogan y Gabriel Yamil interpretarán una selección de poemas, cuentos y fragmentos de las novelas de Julio Cortázar en las que sólo se habla de amor.
Músicos invitados: Saxo: José Ignacio de Carli. Guitarra: Luciano Bagnasco. Bajo: Mariano Urban. Batería: Manuel Buján.
Coordina: Trinidad Baruf
20 hs – Biblioteca Julio Cortázar – Lavalleja 924 – Villa Crespo.
JUEVES 12 DE MARZO
NARRACIÓN
JULIO PARA ARMAR, DE ANA PADOVANI
Poniéndole voz a la letra. Este espectáculo transita por una literatura sorprendente, plena de humor, de ironía, con el suspenso que supone deslizarse del mundo real al fantástico y con el espíritu lúdico que caracterizara al escritor.
19 hs - Biblioteca Antonio Devoto – Bahía Blanca 4025 - Devoto.
SÁBADO 21 DE MARZO
INTERVENCIÓN URBANA
RAYUELARTE DE MARTA MINUJÍN
La Artista Plástica Marta Minujín, dará cierre a este homenaje, con la instalación de 300 rayuelas para jugar en la Av. 9 de Julio. El único requisito para participar es llevar en mano un libro o texto de Cortázar.
20 a 22 hs – Av. 9 de Julio (carriles centrales) entre Córdoba y Lavalle.
Dirección General del Libro
Prensa
4811-9027 int. 102/123