Después de una adaptación relativamente exitosa al amargado humor de nuestras viejas gatas, Sabático pasó una temporada en el campo, donde se integró bastante al resto del gaterío familiar y donde jugó hasta el agotamiento.
Fotos: Guillermo Bertossi
Vueltos a casa, sin embargo, la precaria armonía doméstica había retrocedido hasta la nada misma.
lunes, 11 de enero de 2016
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
Hermoso ser! Tiene carita muy pícara.
Publicar un comentario