sábado, 9 de abril de 2011

Conexiones nerviosas

Por Daniel Link para Perfil

Estoy en San Martín y Viamonte, en una reunión de trabajo. Tengo que estar en Puan y Pedro Goyena a las 19.00, de modo que programo la alarma de mi teléfono molecular para que me avise a las 18.00. Como considero (equivocadamente) que tengo tiempo suficiente, decido tomar los trenes subterráneos, sobre todo porque todavía no conozco la combinación entre las líneas B y H.
Camino por San Martín hasta Corrientes, doblo hacia la derecha hasta la estación Florida, bajo las escaleras, hago la cola para adquirir mi boleto (observo con estúpida satisfacción que mucha gente usa ese sistema de prepago llamado Monedero que no supone descuentos sobre el valor de los pasajes). Compro mi boleto y, después de un par de intentos fallidos, consigo pasar a través de los molinetes atiborrados de personas apuradas (es la temible “hora pico”).
Cuando llego al andén, el tren ya se está yendo y aprovecho los 3,15 minutos de espera para examinar el boleto: pasé a las 18.12 por el molinete, que estampó la leyenda “Boleto con subsidio del Estado Nacional”. Llega el tren, atestado. Comienzo a transpirar copiosamente (en la línea B no hay aire acondicionado). Me bajo en Pueyrredón y combino con la línea H. La estación es preciosa, amplísima y cuenta con aire acondicionado. Pero yo estoy todo transpirado y temo que me haga mal (a la noche, en efecto, estaré tiritando). El tren recién se fue y tengo que esperar 6.30 minutos. Se ve que hay pocas formaciones y las frecuencias (anunciadas en las pantallas) son caprichosas y disparatadas (A: 3,30; B, C, D: 3,15; E: 5,30; H: 6,30). Al menos tengo lugar para sentarme. Me bajo en Humberto Primo para combinar con la E. Cuando llego al andén, corriendo, el tren ya cerró sus puertas. Aquí espero 5.30 minutos (aunque sé que ya no llego: cinco cuadras a pie me separan de mi destino final). El tren viene atestado y vuelvo a transpirar (en la línea E tampoco hay aire acondicionado). Me bajo en José María Moreno porque ya no aguanto más. Tomo un taxi. A las 19.08 consigo llegar a mi destino: más de una hora después de haber emprendido la excursión, empapado, estrujado y de mal humor. Nadie puede jactarse de estar resolviendo ningún problema de transporte en Buenos Aires.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

La intensidad del registro infiere que eras consciente de que ibas a llegar tarde. Te estás justificando.

Podrías haber usado el Bicing.

Hay un carril por persona en las calles. Tenés que usar el tuyo.

rafaawa dijo...

Creo que ya lo dijiste vos en algun otro post: lo único que le interesa a MM son los medios de transporte inviduales (autos y bicis, y bicis digamos que lo hizo a un costo muy bajo y para dejar una huella espacial en la ciudad con su marca). Todo lo colectivo (trenes, subtes, bondis) no representa ningún interés no sólo para MM sino para la mayoría de las grandes ciudades de Argentina. Tal vez Rosario zafe pero no lo conozco tanto...

Schubert dijo...

Jajajajajaja! No seas paquete, che! Viajaste de una manera que un viajante habitual calificaría de 8 a 10. Hablando en serio, sí, es una cagada atómica y no, jamás se resolvió nada agregando la H y extendiendo las lineas (sobre todo la línea A, que ahora al llegar hasta Carabobo tiene la misma cantidad de "coches en vía" y, encima, el cuádruple de pasajeros). En cuanto a lo de aire, en realidad tienen ventilación, que no es lo mismo. El problema es que cuando son 75 tipos más de lo "regular/permitido" te empezás a ahogar, a cagar de calor y, al salir a la calle, pulmonía asegurada.
Así y todo, contando con el subsidio del Estado, viajar en subte es vergonozo y una cagada. Pero sigue siendo la manera MÁS rápida...

Anónimo dijo...

Hiciste mal las combinaciones: si estabas en San Martín y Viamonte, te convenía caminar hasta San Martín y Santa Fe, linea C, bajabás en Indepedencia, linea E.
La otra alternativa más práctica y eficaz, con la que llegabás seguro era ir a Plaza de Mayo, linea A, Plaza de Mayo-Puán.

Linkillo: cosas mías dijo...

¿No fui suficientemente claro? Yo quería conocer una estación en particular. No soy un turista, no necesito consejos.

Anónimo dijo...

prometiste 40 km de subte y hiciste 1.5

por mucho menos un funcionario japones se suicida, y vos buscas ser presidente...

flor dijo...

la tramposa linea H es tan bella como inútil

Anónimo dijo...

Si querías conocer una estación en particular, que te quedaba muy mal para llegar al destino a donde ibas, lo que no se entiende es de qué te quejás. El trayecto era imposible y absurdo. Los transportes en Buenos Aires son una mierda, pero con crónicas como esta no parece que se ayude a solucionar nada.

Cyrena dijo...

No sé por qué a nadie se le ocurre (no a vos, Daniel, que estabas haciendo turismo, sino a los demás que opinan) que lo que debió haber hecho es la combinación en Miserere para seguir hasta Carabobo por la línea A. Son cuatro cuadras hasta la facu en vez de 5 como con la E; y además la conexión vía H es más corta.
Cuando yo trabajaba en San Martín y Viamonte y además cursaba, me iba caminando hasta Plaza de Mayo y me tomaba el A... que terminaba en Primera Junta. Ya en aquella época era lo menos imposible.
La H no va a ser útil hasta que no llegue por lo menos hasta Santa Fe y permita la conexión con la D.
Claro que todo esto no va a servir más que para emputecer si no agregan vagones y suben la frecuencia. La D viene hasta las bolas a cualquier hora, la B más o menos, y con la A está empezando a pasar lo mismo.