martes, 4 de enero de 2005

Síntesis

Respecto de los luctuosos hechos que enlutan la patria, para La Nación, "lo que es claro y lo que queda demostrado con este aumento creciente de la indignación y del número de indignados es que las respuestas que se escucharon hasta ahora son mucho más que insuficientes... Por eso, mientras el jefe del gobierno porteño va camino de romper el récord de conferencias de prensa, en lugar de convencer con sus explicaciones parece avivar con sus palabras el fuego de la bronca popular". Incompetente como es, Ibarra haría mejor llamándose a silencio. Parece que en el exterior, el silencio de Kirchner cae mal, también según La Nación. Tal como he venido diciendo desde el primer momento, La Nación señala que la Ciudad de Buenos Aires deberá indemnizar a las víctimas y sus familiares. Lo mismo insinúa el Boletín Oficial: "si Ibarra dispusiera indemnizaciones en forma inmediata podría amortiguar mejor el impacto político de la tragedia". Por supuesto, no es para amortiguar nada que el Estado deberá indemnizar, sino porque es lo que corresponde, lo que es justo y necesario. No sólo el presidente de la República deberá, algún día, explicarnos su silencio, sino también los intelectuales argentinos, esos prohombres de la razón ilustrada que, hasta ahora, han callado vergonzosamente (sabido es que la mayoría de ellos viven de los dinerillos públicos y los favores de los funcionarios de segundo y tercer orden). Algunos se atreven a hablar y, ay, mejor no lo hubieran hecho. Tal el caso de José Pablo Feinmann, que escribe en Página/12 que "No estamos frente a un tsunami. No estamos frente a una catástrofe natural. Esta es una catástrofe humana. Y la diferencia entre los hombres y un tsunami es que los hombres son responsables de sus actos. Y si sus actos son crueles (y si a esa crueldad se añade el cinismo) deberán responder por ellos". El filósofo hegeliano no se refiere, naturalmente, a los funcionarios que permitieron que esto sucediera (Ibarra a la cabeza) sino a... ¡la descabellada idea de llamar Cromañón al local incendiado! Para lo cual nos hace recorrer el Jurásico, el Terciario y no sé exactamente qué enciclopedias. José Pablo: hace calor, ¿no querés hacer una siestita?
Eduardo Fabregat informa en qué foros (www.losinvisibles.com.ar y www.elrockdelpais.com.ar) se prepara la protesta del próximo jueves: "Señales de una masa de jóvenes profundamente doloridos pero lúcidos, que parecen dispuestos a no dejar bastardear su espacio y que, ante la brutal conciencia de su desamparo, eligieron al compañero más confiable. Mantener esa pureza de ideales será tarea difícil, pero es un buen comienzo", escribe Fabregat (para más datos, su blog).

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