lunes, 31 de octubre de 2011

Carta

"Caro Livio:
Ayer fui a la muestra de libros del bicentenario, en el Conti. Si te soy sincero, te tengo que decir que no me gustó mucho, casi nada te diría. Qué sé yo, me pareció como muy previsible, con ediciones feas, no siempre las primeras , y con una selección demasiado condescendiente, digamos para usar una expresión que entre nosostros es muletilla, con lo dado. Para darte una idea, Livio: el lugar dela poesía argentina es, sin exagerar, alarmante. No digamos que estén Marasso poeta -tampoco, obvio, está Marasso crítico- o Nydia Lamarque -ellos no cotizan ni en las antologías-, lo que sería una exquisitez, sino que ni tan luego está, digamos, Ricardo Molinari, ni Mastronardi, ni Barbieri, nada. En fin, cosas del canon actual. Te tengo que decir también que me deprimió un poco la cosa como unitaria de la muestra, tan del Río de la Plata, tan de entre nos, con un montón de cosas de Borges o Martínez Estrada o Victoria Ocampo (autores respetables, pero sobrerepresentados), con alguna apertura hacia el litoral saeriano, que, bueno, en ese marco no se le puede lógicamente dar lugar a un texto importante como, para poner sólo un ejemplo, Mis montañas de Joaquín V. González, o las recopilaciones de Juan Alfonso Carrizo, monumentos totales de la filología argentina..."

Sigue acá.

2 comentarios:

Schubert dijo...

¿Quién escribe esto, Daniel?

Alfredo D. Moretti dijo...

muy bueno!
pensé que nadie leía al folklorólogo Cortàzar.
me parece que le resta poder destructivo a su crítica hablar en términos de canon, y seguir pegándole a Sarlo (como si siguiera haciendo falta, como si resultara productivo)